¿Cómo hacer que tu vida diaria se sienta más como estar de vacaciones?
- Olalla
- 17 ago 2015
- 3 Min. de lectura
Se terminan las vacaciones de medio año, y es hora de volver al trabajo o los estudios. Y sinceramente que sentimiento más triste da volver de vacaciones o de un viaje de ensueño y tener que enfrentarse de buenas a primeras a la vida real.
Pues para sobrellevar mejor esa melancolía por el viaje que se terminó les tengo 4 tips que podemos hacer durante nuestra vida diaria, para que esa maravillosa sensación de estar de vacaciones se quede con nosotros aunque tengamos obligaciones que cumplir.

Organiza tu tiempo libre
Cuando estamos planeando nuestras vacaciones o un hermoso viaje lo solemos hacer con mucho tiempo de anticipación, eso nos mantiene pensando en algo que nos hace mucha ilusión y nos da ánimo para realizar nuestras obligaciones diarias.
Entonces aunque sólo tengas un rato del domingo libre entre semana: planéalo.
Una reunión con amigos, un picnic en el parque, un paseo a un pueblo cercano, salir a tomar fotos por la ciudad. Cualquier escusa es buena. Organiza tu tiempo libre durante la semana para hacer algo que te ilusione, así tendrás la hermosa sensación de planear y hacer algo que te gusta cada semana, como cuando te fuiste de vacaciones.

Saca tiempo para tus mañanas
Cuando nos vamos de vacaciones hacemos todo más lento, comemos tranquilamente, caminamos despacio, leemos un rato, nos tiramos por ahí… etc. Entre semana laboral solemos hacer todo lo contrario, levantarnos a lo loco, medio tomar un café y salir corriendo a las presas matutinas para llegar a las respectivas obligaciones.
Un consejo para empezar mucho mejor los días es levantarte un rato más temprano por las mañanas (o aunque sea una vez a la semana, cuando te hayas acostado temprano también), y así tener tiempo de cocinar algo rico de desayuno, tomar el café tranquilamente leyendo algo, jugar con tu mascota, cantar en la ducha y todas esas pequeñas cosas que hacemos cuando tenemos las mañanas libres. Eso además hará que tus días empiecen mucho más relajados que otros.

Sácale el jugo a los descansos
Lo más normal del mundo para los que somos simples mortales de la clase obrera es trabajar
todo el día, y en los descansos como la hora del almuerzo o del café seguir pensando en el trabajo o quehaceres.
Lo mejor de las vacaciones por el contrario, es no pensar en esas benditas obligaciones diarias. Entonces aprovechemos los descansos del trabajo para olvidarnos de ellas aunque sea un rato.
Organiza salir a comer con un amigo que no sea del trabajo, tener un compromiso con alguien te obligará a sacar el tiempo sí o sí para despejarte de los quehaceres.
O llévate un libro y deja el celular en la oficina, sumérgete en un mundo lejano que no tiene nada que ver con tus obligaciones mientras disfrutas de tu almuerzo.
Si llevas tu comida contigo no comas en tu lugar de estudios o trabajo, busca un área verde de ser posible, para sentarte. Date un descanso físico pero sobretodo mental del trabajo cada vez que puedas, no importa cuánto ames lo que estás haciendo siempre será bueno para ti.
Prueba algo nuevo
Una de las cosas más maravillosas que nos da viajar es el asombro de ver lugares nuevos y probar cosas que no conocíamos. ¡Pues sigue haciéndolo en tu lugar de residencia!.
Por mucho que ames tu país o ciudad siempre puedes encontrar un rincón que no conocías. O un restaurante de comida étnica que no habías probado nunca. ¡Pide recomendaciones e invita a amigos a acompañarte!
¿No encuentras nada? Prepárate una comida de algún país lejano, recetas hay miles en internet. Sorpréndete a ti mismo con cosas que no conocías, te gusten o no, haber probado algo nuevo siempre es una experiencia positiva que nos alegra el alma. Por eso nos gusta tanto viajar. El asunto aquí es escapar de la rutina lo más posible.

Por supuesto no hay nada mejor que realmente irnos de vacaciones y viajar, pero mientras vuelven nuestros próximos días libres (y el dinero para gastar), podemos llenar nuestra vida de esas pequeñas sensaciones tan ricas de las vacaciones, en nuestra vida diaria.
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